Crear un sitio web, simplemente crearlo, no es difícil. Existen programas online con los que puedes crear tu sitio web en cuestión de minutos por poco dinero, o incluso gratis. ¡Qué guay! ¿no?
También existen aplicaciones en tu móvil para que puedas crear tu propio videoclip musical… pero a no ser que seas el nuevo Freddie Mercury, nadie va a querer ver ese videoclip. Lo mismo pasa en Internet. Entonces, ¿cómo hacer una página web que atraiga a los usuarios que buscas? ¿Cuál es la diferencia entre un sitio web y un BUEN sitio web?
¿Qué debo tener en cuenta a la hora de hacer mi web?
Un buen sitio web debe ser atractivo, armónico, bien estructurado, seguro, ligero, debe generar confianza y sobre todo debe proporcionar información útil y contenidos de interés para contar con posibilidades de posicionar bien en Google. Si quieres que tu sitio cumpla con todo estos requisitos, deberás tener en cuenta muchos pequeños detalles.
En este artículo no vamos a explicar los pasos para hacer un sitio web; más bien vamos a centrarnos en 28 cosas a tener en cuenta, a modo de checklist, para que tu web realmente funcione. Veremos el camino a seguir para obtener el resultado que buscamos.
Dividiremos el proceso en cuatro fases: planificación, desarrollo, SEO y mantenimiento.
PLANIFICACIÓN: 7 pasos para definir tu proyecto de sitio web.

Para construir una buena casa (y que no se caiga), es imprescindible saber algo de arquitectura. Del mismo modo, si vas a construir un sitio web, debes asegurarte de que vas a hacerlo de la manera correcta.
Existen muchas formas de plantear tu sitio web, y cada una persigue unos propósitos determinados. Aquí tienes los siete pasos a seguir para tenerlo todo claro antes de empezar y no encontrarte ninguna sorpresa en el proceso de diseño.
1. Ten un propósito claro.
¿Qué es lo que ofreces? ¿A quién se lo ofreces? ¿Cuáles son tus objetivos?
Las respuestas a estas preguntas definirán todo el proceso de creación de contenidos y condicionarán toda la arquitectura de tu página. Tal vez tengas una idea de diseño o un modelo de página a seguir… ¡no intentes adaptar el contenido condicionándolo a tu idea de diseño! Al contrario, es el diseño el que debe adaptarse a tu idea de la manera más efectiva para que tus objetivos se cumplan.
2. Sé fiel a tu imagen.
Ya seas una empresa o un particular, usa tu logo, tu imagen y tus colores corporativos para que tu sitio web haga entender al usuario que está viendo algo que se identifica con tu marca. Un sitio web sin estilo gráfico da una impresión descuidada y poco profesional.
Aplica tus dos/tres colores corporativos principales y mantenlos en todas las páginas de tu sitio web (así como haces en tu tarjeta de visita, en el rótulo de tu local, en tus folletos etc).
¡Y cuida las tipografías! El usuario debe identificar tu página al instante, de un solo vistazo.
3. Establece un tono de voz.
Define la forma en que vas a comunicarte con los usuarios que visiten tu sitio. ¿Quieres dar a tu público un trato serio y formal, o prefieres conseguirte su confianza con un tono más amigable y cercano? ¿Vas a tutear a tu público o vas a hablarle de usted?
Recuerda que cualquier opción que escojas es válida (siempre que sea consistente con el estilo de tu marca) y puede darte un resultado igualmente profesional. Lo verdaderamente importante es que te decidas y que mantengas el mismo tono en todas tus comunicaciones y en todos los canales.
4. Dedica tiempo al keyword research.
Hay muchas maneras de hablar de un tema. Tu objetivo debe ser escribir sobre aquello que tu público quiere leer, y explicárselo de la forma más sencilla posible, usando las palabras que ellos usarían. Por ejemplo, si escribes sobre mecánica de automóviles, escribir un artículo centrado en las keywords “humo blanco tubo de escape” tendrá mucho mejor resultado que si usas las palabras técnicas “anticongelante en cilindro”, aunque ambas cosas son lo mismo.
Las búsquedas en Google se hacen con fórmulas sencillas, planas, directas.
En Google Trends podrás ver cuáles son las palabras clave más buscadas, y decidir cuáles vas a usar en tu sitio web.
5. Redacta todos los textos antes de empezar.
Prepara tus contenidos antes de empezar con el diseño. Preséntate, di quién eres y qué vendes. Piensa en las cosas que un usuario esperaría encontrar en tu web. Información útil, original, clara y bien estructurada. Incluye fotografías y vídeos si procede, un buscador, artículos, opiniones, enlaces, datos de contacto…
Y presenta la información de modo que el visitante quiera quedarse a navegar un rato por tu página, leer más y saber más. Recuerda… toda la información, siempre, siempre, tiene que estar orientada al usuario, captar su interés y resultarle útil.
6. Escoge bien el nombre de tu dominio.
El nombre del dominio es la puerta de entrada de los clientes hacia tu negocio. Debe ser fácil de recordar: una palabra corta es ideal, y si describe tu actividad o incluye el nombre de tu empresa, mucho mejor.
También puedes optar por un dominio más largo, siempre que sea fácil de recordar. Por ejemplo, usar el nombre completo www.clinicadentalzaragoza.es es más fácil de recordar que usar su acrónimo www.clidenzar.es.
Por otra parte, la extensión .es dará preferencia al público que acceda a tu página desde España, mientras que una extensión .com te dará un público mucho más amplio, siempre que te interese, claro está.
Y recuerda que el nombre de dominio no afecta al posicionamiento en buscadores.
7. Compara hostings antes de contratar.
Equivocarte aquí puede traerte muchos dolores de cabeza. Asegúrate de que el espacio en disco disponible, la velocidad de carga y el ancho de banda se ajustan a tus necesidades. ¡Algunos proveedores ofrecen gato por liebre!
Y ten en cuenta que lo más importante, consideraciones técnicas aparte, es que te ofrezcan un buen servicio de soporte telefónico para cuando surja algún problema (que surgirá): una llamada con un profesional puede ahorrarte muchas horas de desesperación.
Un buen proveedor, además, debe ofrecerte un panel de control completo e intuitivo con el que poder administrar la página y gestionar fácilmente la seguridad, las bases de datos etc. Y si además te da facilidades para la instalación automática de WordPress, ¡mejor que mejor!
DESARROLLO: 7 pasos para construir tu página web sin perderte por el camino.

¡Manos a la obra! Aquí empieza el proceso de construcción de tu página.
Hace unos años era impensable crear una página web si no se tenían conocimientos de html, pero hoy en día hay muchas plataformas que te permiten crear tu web en cuestión de minutos. ¡Incluso puedes crear una página web con Microsoft Word! Pero ojo: que eso sea posible no significa que sea adecuado (vamos, que ni se te ocurra).
A continuación te damos algunos consejos para que escojas el camino correcto y no acabes sumido en la desesperación por haber tomado el camino más fácil.
1. WordPress: una apuesta segura.
Si has decidido montarte la página por tu cuenta, puedes usar alguna plataforma de desarrollo web, como por ejemplo Wix.com aunque… no es la opción más recomendable si quieres montar un proyecto serio.
Nosotros te recomendamos sumergirte en el mundo de WordPress, el gestor de contenidos (CMS) más popular del mundo. WordPress te permite crear todo tipo de páginas web modificables y optimizadas para SEO, con muchos plugins y plantillas prediseñadas.
Te llevará varios días familiarizarte con su funcionamiento, pero los resultados valen la pena.
2. Instala WordPress en tu servidor.
Algunos proveedores de hosting ofrecen facilidades para la instalación de WordPress de forma sencilla o incluso automática. Si tu proveedor no lo ofrece y no tienes experiencia, la instalación puede parecerte complicada, pero no es tan difícil como parece.
Asegúrate de que las versiones de PHP y MySQL de tu servidor permiten la instalación. Aquí puedes encontrar los requisitos actualizados de PHP y MySQL para la última versión de WordPress.
También necesitarás un programa cliente FTP para poder conectarte con el servidor y subir los archivos.
El resto de pasos a seguir para la instalación los encontrarás aquí.
3. Configura los ajustes de WordPress.
Es vital revisar los ajustes antes de empezar a crear tu página. Si no lo haces tendrás problemas con las URL indexadas por Google. Puede que no lo notes al principio, pero con el tiempo te darás cuenta de que tu página no sube puestos en Google, o de que no recibes mensajes de aviso si no escribiste bien tu dirección de email.
También es bueno que revises los ajustes cada vez que instales un plugin. Muchos plugins hacen que aparezcan nuevas opciones que te gustará tener en cuenta para evitarte sorpresas o comportamientos indeseados.
4. Prueba varios temas antes de escoger uno.
WordPress necesita tener un tema instalado para poder funcionar. Dedica un tiempo a explorar los temas gratuitos que encontrarás en la sección “Apariencia / Temas” del menú de WordPress. Instala uno, pruébalo, machácalo, desinstálalo, instala otro, pruébalo… y así hasta que encuentres un tema que se ajuste a tus necesidades y que no tenga muchas más funcionalidades de las que realmente vas a necesitar.
El tema es lo que va a marcar la apariencia de tu web y sus posibilidades de personalización, así que no te tomes esta elección a la ligera. Si finalmente optas por un tema de pago, habrás podido ensayar con los gratuitos y sabrás lo que buscas.
5. Instala un plugin para copias de seguridad automáticas.
WordPress en un sistema dinámico, siempre está en constante cambio, siempre actualizándose y mejorando. En una de esas actualizaciones, puedes encontrarte con una incompatibilidad inesperada que provoque un fallo en tu página. O tal vez seas objetivo de algún ciberataque o de algún virus malintencionado.
No dejes que eso suceda sin tener una copia de seguridad reciente que te permita recuperar tu página y tu base de datos sin perder información. Desde Glight Marketing Lab te recomendamos el All-in-One WP Migration o el UpDraft Plus.
6. Instala un certificado SSL.
Una página web debe inspirar confianza. La manera más sencilla para conseguir una página web segura (https) es obtener un certificado SSL, que hará que aparezca el icono del candado en el navegador, a la izquierda de la url, y marcará tu web como sitio de confianza.
Existen tres tipos de certificados SSL: DV (para webs básicas), OV (para páginas que traten datos personales o bancarios de particulares) y EV (para bancos y similares: seguridad total).
Un certificado SSL-DV puede obtenerse de forma totalmente gratuita, pero la mayoría de proveedores de hosting te lo cobran. No te dejes engañar. Un buen ejemplo de hosting que te ofrece la posibilidad de obtener el certificado de forma gratuita es Arsys. Y un muy buen plugin que te facilitará la instalación del certificado es Really Simple SSL.
7. Optimiza todas las imágenes.
Antes de subir una imagen a tu sitio web, comprueba que su peso y tamaño están optimizados. Las imágenes pesadas ralentizan la velocidad de carga de tu página y hacen que los usuarios se cansen y se vayan a otro sitio. Si optas por usar un plugin, te recomendamos el EWWW Image Optimizer.
Asegúrate de tener los derechos de uso de todas las imágenes, y huye de bajas resoluciones o marcas de agua.
Lo ideal sería usar imágenes propias, hechas por ti, que no estén en internet. Google recompensa el uso de contenido original, ¡y eso incluye las imágenes!.
SEO: 7 maneras de llegar tu audiencia.

Ya hemos visto que es muy conveniente redactar bien los textos y hacer una buena selección de palabras clave. Una vez que tengas estos ingredientes, deberás combinarlos de la manera más adecuada para que Google entienda que tu página ofrece un contenido original, útil y de calidad.
Este es sin duda el punto más importante de lo que llamamos SEO (Search Engine Optimisation). Por muchos trucos y reglas de SEO que apliques a tu página, si el contenido de tu web no es bueno o no interesa, nunca posicionarás bien.
Dicho esto, a continuación veremos siete sencillos consejos para sentar las bases de una buena estrategia de SEO sin necesidad de ser un crack.
1. Optimiza las URL.
Si bien el nombre de tu dominio no va a influir en el posicionamiento de tu página, la segunda parte de la url sí influye. Intenta que sea descriptiva y que incluya palabras clave. Huye de artículos, preposiciones, conjunciones, etc. Mejor “www.academia2.es/curso-jefe-cocina” que “www.academia2.es/curso-para-ser-jefe-de-cocina”.
Recuerda que, si bien los títulos de tu página tienen que ser naturales y descriptivos, las url se dirigen a máquinas, por lo que no hace falta que los redactes para que suenen naturales; mejor asegúrate de que incluyan las palabras clave apropiadas, separadas por guiones y poco más.
¡Ah! Y no uses eñes ni signos de puntuación que no formen parte del alfabeto inglés.
2. No fuerzes los textos.
Cuando redactes un texto no te esfuerces en repetir las palabras clave una y otra vez. Google no es tan ingenuo, y no te va a premiar por eso. Al contrario, lo que Google valora es que el texto sea natural y fluya, y sobre todo, que haga referencia al tema que has escogido para esa página.
Es bueno que la palabra clave aparezca varias veces, pero solo tantas veces como la explicación requiera.
Si en el resto del párrafo hablas con naturalidad sobre el tema propuesto y usas sinónimos y palabras relacionadas, mucho mejor.
3. Usa títulos que llamen la atención.
Cuando hayas redactado cada texto, piensa en el título que mejor describa lo que has escrito.
Los títulos que uses deben ser descriptivos y claros, y al mismo tiempo originales, inspiradores y atractivos. Por ejemplo, “Alimentación adecuada para perros” es mucho menos atractivo que “7 trucos para que tu perro coma mejor”.
Cuida de que el título concuerde siempre con el contenido real del texto que le sigue.
Usa números y crea listas: sé claro. A tus usuarios les gustarán los textos útiles, fáciles de leer y bien estructurados, como el que estás leyendo ;).
4. Cuida bien las etiquetas header.
Las etiquetas header o de encabezado nos ayudan a decirle a Google dónde está el encabezado de nuestras páginas y dónde el resto de encabezados o títulos que ordenan el contenido de las mismas. Estas etiquetas van del “h1” al “h6”, siendo “h1” la más importante y “h6” la menos importante. Los buscadores leen el texto etiquetado como “h1” para entender de qué habla nuestra página, por lo que nunca debemos omitirla, ni usar más de una etiqueta “h1” en una misma página.
También debemos tener en cuenta la continuidad en la jerarquía de las etiquetas y evitar los saltos: no debemos usar etiquetas “h3” o “h4” si no usamos también al menos una “h2”.
Por otra parte, el orden no es esencial; puedes volver de una “h4” a una “h3” sin problema (siempre que, como ya hemos dicho, tengas también una “h2”).
5. Incluye vídeos o infografías.
Si quieres mostrar un contenido que despierte interés, las imágenes son un buen aliado, pero si además añades vídeos originales e infografías útiles, el atractivo de tu página va a incrementarse enormemente, tanto para tus lectores como para los bots Google.
Las infografías bien hechas, claras y coloridas son mucho más fáciles de leer y hacen que el usuario capte la información de un vistazo y, si le interesa, quiera leer más.
En cuanto a los vídeos, basta con decirte que, según Forrester, un minuto de vídeo tiene el mismo impacto que 1,8 millones de palabras. Pero OJO: no alojes los vídeos en tu servidor. Mejor súbelos a tu canal de YouTube y copia el enlace que te aparecerá al pulsar “compartir”. De ese modo ahorrarás espacio en tu servidor y reducirás el ancho de banda.
6. No intentes engañar a Google.
Tu sitio web debe tener el suficiente valor como para justificar su posicionamiento.
Los trucos de SEO sirven para hacer justicia a tu página, para decirle a Google lo bueno que es tu contenido, pero no te servirán para colocar tu sitio web en un lugar en el que no debería estar. Si intentas ganar puestos con recursos engañosos, tarde o temprano serás penalizado.
La base para lograr un buen posicionamiento es un contenido que atraiga visitas. Céntrate en ello. Con el tiempo habrá páginas que enlacen a la tuya, y ahí es donde empieza el éxito.
7. Instala un plugin de SEO.
Existen plugins para casi todo, y aunque no es bueno recargar tu WordPress con demasiados plugins, un buen plugin de SEO on-page puede serte de gran ayuda.
Básicamente lo que hacen estos plugins es analizar el contenido y las etiquetas de cada una de las páginas de tu sitio web y decirte lo que puedes mejorar, dónde has fallado. Te indican si tu página va a ser del agrado de los bots que la visitan y si mereces posicionar bien en los buscadores o no.
Hay muchos otros parámetros de SEO que no vas a poder medir con un plugin de SEO, pero en Glight Marketing Lab te recomendamos el Yoast SEO. ¡Porque una ayudita nunca viene mal!
MANTENIMIENTO: 7 claves para que tu web nunca se debilite.

Todo sitio web necesita de un mantenimiento. Hay tareas que tendrás que hacer cada pocos días, otras cada semana y otras eventualmente. Tal vez te lleven solo unos minutos o, si encuentras alguna incompatibilidad entre plugins o algún problemilla, puede que tardes incluso horas, pero créeme, si no llevas un mantenimiento habitual, puedes acabar con un sitio web caído e irrecuperable.
¿Asumirías ese riesgo? ¡Nosotros no!
Aquí tienes una serie de consejos para mantener tu sitio web a salvo de imprevistos y sorpresas desagradables.
1. Nunca des tu sitio web por terminado.
Internet es un organismo vivo, que crece y cambia constantemente; tu sitio web debe ser algo igualmente cambiante y dinámico. Dejar que tu web se mantenga estática durante mucho tiempo puede perjudicar seriamente a su posicionamiento.
Los buscadores valoran el contenido fresco y dinámico, por lo que siempre debes tratar de incluir temas nuevos, comentarios y enlaces que muestren que tu sitio web está constantemente actualizado.
Haz cambios estéticos, añade páginas, funcionalidades o plugins… que los buscadores entien dan que tu web no es un lugar monótono y aburrido.
2. Mantén WordPress, temas y plugins siempre actualizados.
Los plugins son muy buenos aliados a la hora de implementar mejoras y utilidades a tu sitio web, pero pueden ser un problema si no se cuidan y se revisan periódicamente. Visita tu panel de control con frecuencia y comprueba que tu instalación de WordPress está actualizada.
Actualiza también los plugins y asegúrate de que sean compatibles con la versión de WordPress que hayas instalado. Huye de las actualizaciones automáticas en los plugins que puedan afectar al funcionamiento de tu sitio web; si se actualiza un plugin automáticamente y este falla por la razón que sea, puede que tu web se caiga y tú no te des cuenta hasta que sea tarde y empieces a recibir quejas de tus usuarios.
3. Usa contenidos evergreen o actualízalos si es necesario.
Si tienes un blog, actualiza las fechas y los contenidos de acuerdo con la situación de cada momento. Si no es necesario poner la fecha de publicación en cada post o si no aporta nada, elimínala. Así evitarás que tu contenido se vea obsoleto.
Si tienes contenido del tipo “los mejores consejos para 2020”, actualiza ese título a 2021, siempre que el contenido se adapte y pueda encajar perfectamente en el nuevo título.
4. Instala un plugin de seguridad.
Aunque WordPress sea una plataforma segura, nunca está de más contar con un plugin que minimice las posibilidades de un ataque externo.
Desde Glight Marketing Lab te recomemndamos “All In One WP Security & Firewall” por ser un aliado estable, sencillo, completo y de uso intuitivo. Te ayudará a identificar las vulnerabilidades de tu sitio web y a ponerles remedio. No es un plugin que funcione de manera automática pero esto no es un problema, sino una enrome virtud; seguir el proceso que te va indicando el All In One te ayudará a aprender y a entender muchas maneras en que tu web puede ser atacada y cómo evitarlas.
5. Evita los enlaces rotos.
Tener enlaces en tu página es muy bueno. Los enlaces internos ayudan a que los usuarios pasen más tiempo en tu página, y los externos complementan la información y pueden servirte para negociar backlinks desde otras páginas hacia la tuya. Pero ojo, con el tiempo puede que muchos de esos enlaces acaben apuntando a ninguna parte, ya sea por cambios en las URL o porque la información se ha movido de sitio.
Esos enlaces rotos, además de frustrar a tus usuarios, te pueden costar una penalización en los buscadores.
Revisa todos los enlaces de tu web periódicamente o utiliza un plugin, como Broken Link Checker, para localizarlos.
6. Revisa y optimiza la velocidad de carga.
Hemos visto que el contenido es la parte más importante en la estrategia para atraer usuarios hacia tu web. Pero si esos usuarios abren tu página y ven que tarda más segundos de los que están dispuestos a esperar, vas a perderlos irremediablemente.
Haz que todo el trabajo y el tiempo que has invertido en tu web sirva para algo: optimiza el tiempo de carga de cada página.
Puedes hacerlo reduciendo el tamaño de las imágenes, revisando la efectividad del tema que usas o midiendo cómo afecta a la carga cada uno de los plugins que tienes instalados.
Una vez más, te recomendamos usar un plugin para ahorrarte tiempo y preocupaciones. El mejor según nuestra experiencia es el P3 (Plugin Performance Profiler).
7. Plantéate contratar un servicio de mantenimiento web.
Te hemos contado aquí la teoría sobre cómo mantener tu sitio web activo y a salvo. Ahora debes decidir si vas a hacerlo tú mismo o si quieres dejarlo en manos de profesionales.
Ambas opciones son válidas, simplemente tienes que cuantificar el tiempo que vas a dedicarle al mantenimiento y plantearte si te vale la pena hacerlo tú o si prefieres encargárselo a un especialista. Por una parte, hacerlo tú te saldrá más económico, pero por otra, en caso de que surja un problema, tienes que estar seguro de poder solucionarlo.
¿Te vale la pena el gasto o prefieres cargar con la tarea? ¡Tú decides!